Cada vez que nos proponemos avanzar en algo se van a presentar obstáculos que quieren impedir nuestro progreso.
David no era la excepción el reconocía que tiene muchos enemigos. El apóstol pablo sabía que así como se le abrían muchas puertas para avanzar en su ministerio también eran muchos los que se las querían cerrar. 1 Corintios 16: 9 “porque se me ha abierto puerta grande y eficaz, y muchos son los adversarios.”
Como Ser Libres de Nuestros Enemigos.
1. Saber que Dios Pelea por Nosotros. Deuteronomio 1: 30 “Jehová vuestro Dios, el cual va delante de vosotros, él peleará por vosotros, conforme a todas las cosas que hizo por vosotros en Egipto delante de vuestros ojos.”
2. Dejar que Dios Pelee por nosotros. Salmo 35: 1-2 “Disputa, oh Jehová, con los que contra mí contienden; Pelea contra los que me combaten. 35:2 Echa mano al escudo y al pavés, Y levántate en mi ayuda.” de nada sirve saber que Dios pelea por nosotros si nosotros no dejamos que Dios actué.
3. Conocer a nuestros enemigos en cada una de nuestras áreas.
3.1. Física. Hay personas que nos odian por envidia o por simple maldad. V 11-12 “Se levantan testigos malvados; De lo que no sé me preguntan; 35:12 Me devuelven mal por bien,
Para afligir a mi alma.” antes de sentirte mal o culpable por lo que te dicen. Mira de quien proviene esa crítica.
Para afligir a mi alma.” antes de sentirte mal o culpable por lo que te dicen. Mira de quien proviene esa crítica.
3.2. Emocional. Los seres humanos muchas veces nos dejamos llevar por nuestras emociones. El miedo, la vergüenza, el que dirán. Etc. El principal enemigo de nosotros muchas veces somos nosotros mismos.
3.3. Espirituales. Cuando nos proponemos estudiar la Palabra, orar o servir en la congregación sentimos que se levantan muchos enemigos tales como: la Pereza, el sueño, el desánimo, distractores como cosas del mundo a las cuales le damos más importancia que a las cosas de Dios.
Que hacer frente a nuestros enemigos físicos.
1. Orar por ellos. Eso es lo que nos pide Jesucristo. V 13 “Pero yo, cuando ellos enfermaron, me vestí de cilicio; Afligí con ayuno mi alma, Y mi oración se volvía a mi seno.” Mateo 5: 44 “Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen;” si nuestros enemigos son espirituales o emocionales también tenemos que orar para que Dios nos ayude a salir de esos enemigos que nos impiden avanzar.
2. Hacerles a ellos lo que queremos que hagan con nosotros. Mateo 7: 12 “Así que, todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque esto es la ley y los profetas.”
3. No pagar mal por mal. Romanos 12: 17-20 “No paguéis a nadie mal por mal; procurad lo bueno delante de todos los hombres. 12:18 Si es posible, en cuanto dependa de vosotros, estad en paz con todos los hombres. 12:19 No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor. 12:20 Así que, si tu enemigo tuviere hambre, dale de comer; si tuviere sed, dale de beber; pues haciendo esto, ascuas de fuego amontonarás sobre su cabeza.
12:21 No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el mal.”
12:21 No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el mal.”
Es normal que cada vez que queremos iniciar algo encontremos impedimentos que les llamamos enemigos. Lo que no es normal es que nos dejemos dominar por ellos. Esfuérzate se valiente y sobre todo deja que sea Jehová quien pelee por ti.